La medicina nuclear emplea tecnología avanzada en exploraciones no invasivas para capturar imágenes funcionales y moleculares de órganos y tejidos sin generar efectos adversos, lo que facilita diagnósticos y tratamientos precisos.
La Medicina Nuclear es una especialidad médica que utiliza pequeñas cantidades de sustancias radiactivas para diagnosticar y tratar enfermedades.
Los estudios más comunes realizados en Medicina Nuclear son la gammagrafía ósea, la gammagrafía de tiroides, la gammagrafía renal y la gammagrafía pulmonar.
Para realizar un estudio de Medicina Nuclear, se administra al paciente una pequeña cantidad de una sustancia radiactiva, ya sea por vía oral, intravenosa o inhalada. Luego, se utiliza una cámara especial para detectar la radiación emitida por la sustancia y obtener imágenes del órgano o tejido en estudio.
Sí, los estudios de Medicina Nuclear son seguros y no causan dolor ni malestar. Las dosis de radiación utilizadas son muy bajas y los beneficios de obtener un diagnóstico preciso superan los riesgos asociados.
La preparación necesaria antes de un estudio de Medicina Nuclear varía según el tipo de estudio. En algunos casos, es posible que se requiera ayuno previo, suspensión de medicamentos o evitar el consumo de ciertos alimentos o bebidas. El médico encargado del estudio proporcionará las indicaciones específicas.